Según la Organización Mundial de la Salud, un peso adecuado y una alimentación balanceada pueden servir de preventores de diversas enfermedades, lo cual resulta ser una buena noticia, ya que si eres capaz de mantenerte en tu peso ideal, definitivamente estarás protegiéndo tu organismo de pescar algunas enfermedades serias, tales como hipertensión, accidentes cerebrovasculares, enfermedad del páncreas e hígado, además de colesterol y triglicéridos altos, problemas del corazón en general y algunos tipos de cáncer.
Teniendo todo esto más claro, es importante adquirir entonces nuevos hábitos relacionados con la alimentación y estilo de vida, ya que entre las principales causas del sobrepeso están los malos hábitos alimenticios y la falta de ejercicio físico, aunque pueden exister factores genéticos y metabólicos que dificulten alcanzar un peso ideal.
Es recomendable realizar 3 comidas diarias y 2 tentempiés, nunca dejar de desayunar, cenar sin excesos, no consumir azúcar refinada ni pastelería industrial, eliminar completamente la comida chatarra, y periódicamente realizar ejercicio físico.
El peso justo. Algunos especialistas definen el peso ideal como aquel con el cual un individuo se encuentra a gusto y está en condiciones de desarrollar normalmente todas sus funciones biológicas.
Sin embargo son muy vistas las tablas de “peso ideal” en libros o revistas de dietas y nutricón -aunque los valores que allí se indican son sólo promedios estadísticos-.
Mientras algunas personas mantienen su peso ideal en 60 kg, otras lo hacen en 50 ó 55 kg con la misma altura. Todos los individuos somos diferentes: tenemos diferentes relaciones masa muscular/masa grasa, secreciones hormonales variables, etc. Siguiendo este criterio, la altura es uno de los tantos parámetros para estimar el peso teórico óptimo.
La gran mayoría de los nutricionistas consideran la “complexión” como parámetro primordial para evaluar el peso justo: el diámetro de los hombros varía mucho según la persona y esto nos indicará si es pequeña, mediana o grande.
La edad es otro factor importante a tener en cuenta. A partir de los 25 años aproximadamente, el peso no deberá tener grandes variaciones, a no ser ligeros aumentos luego de los cuarenta años.
La mujer naturalmente experimentará un incremento de peso a partir de la menopausia, luego de la cual su grasa corporal se redistribuirá.
Otro dato interesante es que casi todas las mujeres en edad fértil aumentan de peso los días previos a la menstruación.
Esto se considera normal mientras dicho aumento no sobrepase los 2Kg.
El sexo de la persona también determinará cual es peso adecuado para ésta. El hombre tiene mayor desarrollo de masa ósea y muscular, la cual es mucho más pesada que el tejido graso.
Teniendo en cuenta todos estos factores se ha diseñado la tabla de peso teórico para hombres y mujeres que vemos a continuación. Puedes conseguirla en www.cienciaplus01.blogspot.com
Infusiones que adelgazan. Existen cuatro infusiones que pueden ayudarnos a eliminar esos molestos kilos que suelen ser imposibles de bajar. Desde ya estas no funcionarán si no se hace una dieta adecuada.
Las hierbas son el pilar fundamental de los preparados dietarios que generalmente recomiendan quienes están a favor de los remedios naturales y bajo ningún concepto deben ser subestimadas.
Se recomienda preparar las infusiones de la siguiente manera, para que no tengan una concentración inadecuada: mezclar dos cucharadas de hierba por litro de agua y deje que la preparación hierva por 5 minutos.
Té de focus. Es la principal hierba adelgazante que contienen los suplementos naturales.
Es ideal para combatir la obesidad y el hipotiroidismo.
Té de centella asiática. Al favorecer a la circulación sanguínea, es un efectivo suplemento para luchar contra la celulitis.
